¿DEBERÍA
HACERSE OBLIGATORIA LA VACUNACIÓN CONTRA EL COVID 19?
En mi opinión, la respuesta a esta
pregunta es “sí”. Aunque lo ideal sería una voluntariedad unánime favorecida
por campañas de información que ilustren sobre los beneficios de la vacunación,
considero que si esto no ocurriese así debería aplicarse una obligatoriedad
para realizar esta acción a todos los individuos, ya que la inmunización es la
única manera de concluir esta situación en la que todos nos vemos afectados.
Evidentemente, esta y cualquier
obligatoriedad afecta al derecho de la libertad individual, conforme al cual cada
uno tiene la posibilidad de decidir autónomamente sobre las cuestiones
esenciales de su vida, haciéndose responsable ante la sociedad de las
consecuencias de sus decisiones y de los resultados de su propia acción. Sin
embargo, hay casos como este mismo en la que se requiere realizar una
limitación de las libertades individuales para poder favorecer a la mejora de
una situación.
Considerando como comprobada la eficacia
de las vacunas y los procesos de vacunación para controlar y erradicar
enfermedades, y dadas las circunstancias actuales es necesario anteponer el bienestar
general de la sociedad frente al derecho a la libertad individual, para poder
concluir así con la triste situación actual. De hecho, ya encontramos ejemplos
en los que la obligación de algo ya ha sido establecida, priorizando el
bienestar general, y a veces también el bienestar personal, frente al derecho
de libertad individual. Ejemplos de esto son la obligatoriedad de llevar el
cinturón de seguridad puesto al circular en coche, o casco al hacerlo en moto,
dónde el mayor beneficiado de esta limitación es el propio limitado. Otro importante
ejemplo es la enseñanza obligatoria.
Para concluir, y observando los argumentos
presentados, considero que la vacunación frente al Covid-19 debería ser obligatoria,
favoreciendo así a ese bien común que además ayudaría a terminar con una situación
dolorosa y complicada para todos.
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